Entre el éxito en televisión abierta, su nueva etapa como Julián en Una familia de diez y el salto al cine con “Un día de suerte”, Oswaldo Zárate se consolida como uno de los actores más versátiles y queridos de la comedia mexicana.
Escrito por: Rodrigo Pujol Del Toro
En la tele mexicana hay caras que ya se sienten de casa. Oswaldo Zárate es una de ellas. Después de romperla como “El Borre” en 40 y 20 y conquistar plataformas con De Brutas Nada en Sony Channel y Amazon Prime Video, hoy vive una nueva etapa como Julián en “Una familia de diez”, uno de los fenómenos de comedia más longevos y queridas de Televisa.
Pero detrás de las risas hay toda una declaración de principios: no quedarse en la zona de confort. Y eso se nota en cada decisión de su carrera.
Julián, el flojo adorable que se “cree” comentarista deportivo
En esta nueva temporada de Una familia de diez, Oswaldo regresa por tercera vez consecutiva como Julián, personaje que llegó “de refuerzo” en la temporada 10 y que hoy ya es parte del ADN de la familia López.
“Es la tercera temporada que me invitan y estoy muy agradecido. El público tomó muy bien la entrada de mi personaje y eso abrió la puerta para que me dieran más capítulos y más historia”, cuenta.
En esta etapa, Julián vive dos grandes arcos:
Se enamora de Sucy, interpretada por Luz Edith Rojas, la famosa “chava del caballo” que vive en la playa con Plácido; ahora la vemos más integrada a la casa, a visitas de ida y vuelta y a momentos llenos de humor y ternura.
Y descubre su vocación… o eso cree: quiere ser comentarista deportivo.
El origen de esa idea es oro puro:
“Los escritores me dijeron que querían meter algo deportivo y me preguntaron si veía deportes. Les dije ‘claro, en mi casa siempre está la tele prendida’. Entonces armaron que Julián va con un brujo que le dice que no se preocupe por trabajar, que se dedique a los deportes porque es una profesión donde estás sentado narrando partidos. Una profesión ‘floja’, pues”, ríe.
La parte más divertida para él fue el reto actoral: no basta con imitar a un comentarista, sino hacer que Julián crea que lo hace bien… aunque narre fatal.
“Tuve que observar a comentaristas como David Faitelson y Christian Martinoli, pero no para hacerlo perfecto, sino para que se notara que Julián lo intenta… y lo hace muy mal. Es Oswaldo haciendo a Julián, y Julián creyéndose bueno cuando no lo es. Fue un juego muy divertido”.
De fan a compañero: la escuela de Jorge Ortiz de Pinedo y los grandes de la comedia
Antes de llegar al set, Oswaldo ya era fan.
“Yo veía Una familia de diez cuando estudiaba actuación. Jamás imaginé estar ahí 18 años después. Sentirme parte de esa familia es un premio a muchos años de esfuerzo”, confiesa.
Sobre trabajar con Jorge Ortiz de Pinedo, Zully Keith, Eduardo Manzano “El Polivoz”, Carlos Ignacio y compañía, la palabra que repite es escuela:
“Son personas que veía de niño en Cándido Pérez, en los programas de Anabel, en el cine. Y ahora son mis compañeros. Lo que más me impresiona es su sencillez y profesionalismo. Creerías que por tanta trayectoria serían los más complicados… y son los más humildes”.
De Ortiz de Pinedo se lleva una lección de producción total:
“Jorge escribe, produce, actúa y está pendiente de todo: sonido, arte, colores. Eso te enseña a ser mejor actor, a respetar todos los departamentos y a entender que lo que haces se queda grabado para siempre”.
Más allá de “El Borre”: cero zona de confort
Aunque “El Borre” de 40 y 20 le dio una popularidad masiva, Oswaldo es muy claro: no quiere ser un actor de un solo personaje.
“Amo al Borre, pero no quiero quedarme ahí. Siento que como jugador profesional hay que retirarse en la cúspide. No me gusta trabajar solo por el cheque o por ser famoso; eso ya lo viví. Ahora quiero seguir creando personajes nuevos, armar psicologías distintas y no volverme un actor ‘huevón’”.
Acepta que Borre y Julián comparten algo:
“Los dos son bien flojos y siempre ven de dónde los mantengan”, bromea. “El reto fue encontrarles una voz distinta, matices diferentes, que no fueran clones. Ver a Julián en pantalla y sentir ‘lo logré’ es muy satisfactorio. Me gusta que el público entienda que donde esté, voy a ofrecer calidad, no relleno”.
Y el público lo confirma cada vez que lo confunde con sus personajes en la vida real:
“En la película ‘Todas menos tú’ hubo una señora que casi me da con el bolso porque pensaba que yo sí le había puesto el cuerno al personaje de la chava. Ahí te das cuenta de que la gente se cree lo que haces. Eso es un privilegio, pero también una responsabilidad”.
Tele abierta, plataformas y una meta clara para 2026
Aunque ha trabajado con TV Azteca (Educando a Nina), Telemundo (La mujer de mi vida), Sony Channel, Prime Video y HBO Max (Todas menos tú), Oswaldo no piensa soltar la televisión abierta.
“Me he dado cuenta de que soy muy querido en muchos pueblos y ranchos, lugares donde la gente no tiene para pagar plataformas. Amo las plataformas, pero no quiero dejar de hacer tele abierta. Me gusta saber que llego a casas donde quizá la única ventana al entretenimiento es el canal de siempre”.
La razón es grande: se prepara para protagonizar y producir su primera película, “Un día de suerte”.
“Estoy muy emocionado porque será mi primera película como actor y como productor ejecutivo. Ya estamos en juntas, armando elenco, fotógrafo, equipo… Tenemos más de la mitad del proyecto cerrado y la idea es arrancar rodaje en el primer trimestre del año, primero Dios”.
Su apuesta es clara: combinar cine y televisión abierta, seguir explorando personajes y no perder nunca el contacto con el público que lo ha acompañado desde que arrancó en foros independientes y telenovelas como Rebelde, Miss XV o Despertar contigo.
De teatro independiente a rostro familiar en el prime time
Detrás del comediante hay un actor con tablas. Oswaldo se formó en el teatro, con más de 10 puestas en escena en foros como El Galeón, El Vicio y el Trolebús Escénico Condesa, en obras como La mujer no hace milagros, El censo y Ultimátum.
En TV ha transitado por telenovelas como Rafaela, Antes muerta que Lichita, Educando a Nina, La mujer de mi vida y series como XY, Lorenza, De Brutas Nada y la pionera digital 24 casetas, producida en Buenos Aires para Twitter.
En cine ha participado en títulos como Viaje de generación (disponible en Prime Video y ViX), Juegos inocentes, Paradas continuas, Loco fin de semana, Ladies’ Night, Rebeldes de altura, El padrino de la boda y Todas menos tú, disponible en HBO Max.
Por qué no te puedes perder la nueva temporada de Una familia de diez
Para cerrar, Oswaldo lo resume fácil:
“La temporada de Una familia de diez es un pretexto perfecto para que los domingos a las 8 de la noche te juntes con tu familia o tus amigos. Son 30 minutos donde lo único que queremos es divertirte. Queremos que arropen a los personajes nuevos y que sigan queriendo a esta familia que lleva 18 años en la tele. Todos nos hemos visto reflejados en alguno de ellos: tu tía, tu prima, tu abuelita. Es una serie muy respetada que solo busca eso: hacerte pasarla bien”.
Y mientras Julián sueña con narrar partidos sentado en el sillón, Oswaldo Zárate hace justo lo contrario: salir a jugar en todas las canchas posibles, arriesgarse a cambiar de personaje y demostrar que la comedia también se construye con rigor, disciplina y mucho corazón.
Si quieres seguirle la pista, lo encuentras como @soyoswaldozarate en Instagram, TikTok, Facebook y X.
Para brindar las mejores experiencias, en Thunder MX utilizamos tecnologías como cookies para almacenar y/o acceder a información del dispositivo. Consentir a estas tecnologías nos permitirá procesar datos como el comportamiento de navegación o identificadores únicos en este sitio. No consentir o retirar el consentimiento puede afectar negativamente ciertas características y funciones.
Functional Siempre activo
The technical storage or access is strictly necessary for the legitimate purpose of enabling the use of a specific service explicitly requested by the subscriber or user, or for the sole purpose of carrying out the transmission of a communication over an electronic communications network.
Preferences
The technical storage or access is necessary for the legitimate purpose of storing preferences that are not requested by the subscriber or user.
Statistics
The technical storage or access that is used exclusively for statistical purposes.The technical storage or access that is used exclusively for anonymous statistical purposes. Without a subpoena, voluntary compliance on the part of your Internet Service Provider, or additional records from a third party, information stored or retrieved for this purpose alone cannot usually be used to identify you.
Marketing
The technical storage or access is required to create user profiles to send advertising, or to track the user on a website or across several websites for similar marketing purposes.